"Hemos visto la información sobre nuevas inspecciones sorpresa, (…) socavan la transparencia y la previsibilidad, hacen que sea imposible una transparencia eficaz y útil así como el control de las maniobras", dijo al comentar la nueva inspección a las Fuerzas Armadas iniciada por Rusia.
Según Stoltenberg, "uno de los desafíos que crean los ejercicios sorpresa es que representan un modo para no cumplir con los acuerdos que contiene el Documento de Viena y no avisar de las maniobras sorpresa".
El secretario general de la Alianza recordó que por este motivo la OTAN se expresa a favor de "modernizar el Documento de Viena para que se pueda prever el control de las inspecciones sorpresa".
El viceministro de Defensa, Anatoli Antónov, comunicó que Rusia informó a los países signatarios del Documento de Viena (2011) de haber iniciado la inspección.
El Documento de Viena sobre Medidas de Fomento de la Confianza y la Seguridad, aprobado en 2011, prevé el intercambio de información sobre las fuerzas armadas, planes de defensa y los presupuestos militares.
Los países signatarios se informan mutuamente sobre determinados tipos de actividades militares, invitan a observadores y realizan inspecciones.