"Creo que su reacción (de Turquía) a la decisión del Bundestag es totalmente desproporcionada", dijo el jefe de Exteriores ruso a la televisión Rossiya-1 este sábado.
En opinión de Lavrov, el reconocimiento por los diputados alemanes del genocidio de los armenios en el Imperio otomano a principios del siglo XX se debe "a la renuencia de Turquía a ser realmente un socio en varios asuntos, a los escándalos que pretende desatar de vez en cuando y a las tentativas de insultar a sus socios, también en Europa".
El Parlamento de Alemania aprobó el jueves una resolución que declara como genocidio la masacre de los armenios en 1915 y 1916 por el Imperio otomano.
La resolución fue aprobada por la mayoría de los diputados con tan solo un voto en contra y una abstención.
El presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, afirmó que el reconocimiento del genocidio afectará seriamente a los lazos bilaterales.
Turquía rechaza las acusaciones de genocidio –reconocido hasta el momento por varios Estados, entre ellos Rusia– alegando que las víctimas de la tragedia fueron ambos pueblos, el armenio y el turco.