La policía irlandesa investiga la posible relación de ambos violentos incidentes que podrían deberse a un ajuste de cuentas entre bandas de narcotraficantes con conexiones en la Costa del Sol.
Medios locales relacionan al último asesinado con Gary Hutch, quien fue asesinado en una urbanización en los alrededores de Marbella el año pasado.
La BBC señaló antes que la disidencia republicana se había responsabilizado del asalto con balas en un hotel de Dublín en que murió un hombre y otros dos resultaron heridos.
La muerte de este lunes se produjo en la misma zona del norte de la capital irlandesa.