La huelga entre los refugiados la secundan también mujeres y niños.
El fin de semana pasado casi 70 refugiados fueron trasportados a la provincia norteña de Finnmark, que colinda con Rusia, para su expulsión del país.
Uno de los refugiados reveló a la televisión que el servicio migratorio prometió conversar con los migrantes, pero no ha cumplido su promesa.
"No hemos recibido información alguna", dijo al indicar que en respuesta los refugiados se declararon en huelga de hambre.
Las autoridades de Noruega informaron, con anterioridad, que 5.500 refugiados llegaron al país cruzando la frontera con Rusia y señalaron que era posible que no se les permitiera permanecer en el país.
De momento se examina cómo realizar la deportación: la propuesta de hacerlo en bicicleta (como llegaron al país) provocó una oleada de críticas teniendo en cuenta las condiciones climáticas del actual invierno.