"Tiene lugar la crisis del Homo Europeus", ha constatado el experto señalando que en varios países del bloque, en particular en Hungría, Polonia, Finlandia, Dinamarca, Gran Bretaña y Francia, renace el nacionalismo que se manifiesta en dos formas: la populista o la patriótica.
Además, según Gros-Verheyde, en algunos de estos Estados está en marcha una especie del "golpe constitucional" apuntado a lanzar un desafío a los logros anteriores de la UE.
A su juicio, los europeos ya no quieren llevar una vida en común sino coexistir en el mejor de los casos, ya no creen en la solidaridad sino solo en las relaciones de mercado.
La Unión Europea se ha extraviado, al parecer, y ya no tiene nada que ver con el proyecto concebido por sus padres fundadores, el de ser una comunidad de humanitarismo progresista, resume Gros-Verheyde.