"Es simplemente inaceptable aplicar al proceso electoral en Donbás una legislación cuya naturaleza es imperfecta", dijo el diplomático al criticar el planteamiento de representantes ucranianos en el Grupo de Contacto Trilateral.
A su vez, la Oficina de Instituciones Democráticas y Derechos Humanos (ODIHR) de la OSCE tendrá que garantizar el cumplimiento de los estándares de estas elecciones, indicó Lukashévich.
Después, prosiguió, el estatus de la región, que hasta entonces había sido temporal, deberá recibir "un permiso de residencia permanente".
"Es decir, mucho dependerá de la ODIHR en cuanto a seguimiento y evaluación de estos comicios por los estándares aceptados en la práctica internacional", señaló.
En cuanto a las últimas, las autoridades de las dos repúblicas autoproclamadas fijaron sus propias fechas que diferían de las de Kiev, pero posteriormente acordaron postergar la votación del 18 de octubre y del 1 de noviembre de 2015 al 20 de marzo de 2016.
Con este aplazamiento el Gobierno ucraniano obtuvo más tiempo para cumplir los acuerdos de Minsk y poner fin al conflicto en Donbás.
Ucrania se comprometió a conceder a Donbás una mayor autonomía, amnistía para los involucrados en los sucesos que tienen lugar en la región y poner a votación las enmiendas constitucionales acordadas con las repúblicas autoproclamadas.