"La llegada del frío, la información sobre la construcción de una valla en la frontera ente Serbia y Hungría, todo esto significa que los refugiados no tendrán la oportunidad de dirigirse a donde planearon, la situación puede llegar a ser muy grave", dijo.
Según Krum-Hansen, las autoridades serbias emprenden todas las medidas necesarias para apoyar a los inmigrantes, pero precisó que "un país no puede solucionar este problema por sí solo".
"Todos los países que se encuentran en la misma situación, la Unión Europea y todos los actores clave a nivel internacional tienen una responsabilidad y deben ayudar en la solución del problema", afirmó.
Serbia, país no miembro de la UE, se ha convertido en uno de los principales destinos de los refugiados que pretenden así entrar en los Veintiocho, a través de la frontera con Hungría.