"Confió a cada una de ellas a la misericordia de Dios y a Él pedimos que nos ayude a cooperar para impedir estos crímenes que ofenden a toda la familia humana", señaló.
El pontífice instó a los fieles a orar en silencio por "los numerosos migrantes que han perdido la vida en sus terribles viajes" y aseguró que rezará por "las 71 víctimas, entre ellas cuatro niños, encontradas en un camión en la autopista entre Budapest-Viena".
Francisco pidió igualmente a la comunidad internacional a "hacer algo para poner fin a la violencia y abusos de poder" que obligan a esos inmigrantes, al igual que a los cristianos de Irak y de otros países, a escapar en busca de refugio.
Según los últimos datos presentados por la ONU, en 2015 unas 300.000 personas intentaron entrar ilegalmente en el territorio europeo.
Más de 190.000 ilegales lograron llegar a las costas de Grecia e Italia cruzando el Mediterráneo, mientras unas 2.500 perecieron en la travesía.
El pasado jueves la policía de Austria encontró en el contenedor de un camión a 71 personas fallecidas, entre ellos 8 mujeres y cuatro niños.