"Hemos preparado un escenario detallado para una eventual salida de Grecia", ha dicho Juncker tras la cumbre extraordinaria de los países del euro.
El responsable del brazo ejecutivo de la UE aseguró "estar totalmente en contra de la salida de Grecia", aunque advirtió que no podrá evitarlo "si el Gobierno griego no hace lo que se espera de él".
El plazo para que el país heleno presente sus propuestas sobre el programa de reformas necesarias para acceder a la ayuda financiera vence a las 8.30 CET de este viernes, recordó Juncker.
"En cuanto a las obligaciones ante Grecia por parte del Banco Central Europeo y otras instituciones, dependerán de las propuestas que el Gobierno heleno debe hacer a las 8.30 del viernes como plazo límite", dijo.
Juncker agregó que la Comisión Europea está dispuesta a volver a abordar las cuestiones relativas a la deuda griega en octubre próximo, siempre que las dos partes lleguen a un acuerdo sobre el nuevo paquete de créditos del Mecanismo Europeo de estabilidad (MEDE) a cambio de las reformas en el país.
A su vez, el presidente del Consejo Europeo, Donald Tusk, dijo que la crisis de la deuda griega debe resolverse durante esta semana.
"Hoy debo decir que el plazo límite es esta semana", declaró al término de la cumbre.
El jueves 9 de julio "a más tardar" el Gobierno griego deberá presentar sus propuestas detalladas "para una agenda global y específica de reformas", indicó.
El responsable del Consejo Europeo anunció asimismo que el domingo próximo los jefes de Estado y de Gobierno europeos se reunirán para abordar la crisis griega y que también se celebrará una nueva cumbre de la zona euro.
"Hemos decidido que necesitamos dos formatos en la cumbre del domingo: todo el grupo de los veintiocho países (de la UE) y, probablemente, una hora para los miembros de la zona euro", explicó.
Atenas mantiene desde hace meses negociaciones con sus acreedores (Comisión Europea, Banco Central Europeo y el FMI) para reestructurar una deuda de más de 240.000 millones de euros, el monto de los dos rescates que necesitó para evitar el impago técnico en 2010 y 2012.
La cumbre extraordinaria de los países de la zona euro fue convocada después de que en el referéndum del pasado domingo el 61% de los griegos apoyara el "no" a las exigencias de los acreedores europeos de aplicar una política de riguroso ahorro a cambio de la financiación externa de la deuda del país.