"Creo que este caso es completamente irrelevante a efectos jurídicos porque no existe nada imputable", señala a Sputnik Nóvosti Erlantz Ibarrondo, abogado de Héctor Arroyo, uno de los detenidos el pasado 27 de febrero.
El letrado afirma que en el expediente no hay ninguna conducta que pueda ser jurídicamente desaprobada, por lo que "no hay riesgo de que se les imponga una pena".
Ante la declaración de este jueves, que se celebrará a las 10 de la mañana (hora española) en la Audiencia Nacional de Madrid, Héctor Arroyo aseguró a Sputnik Nóvosti sentirse "bien" y "tranquilo".
Su abogado confía en que el procedimiento se archive y la causa termine sin mayor repercusión.
Ibarrondo se muestra confiado en que el juez entenderá que el objetivo de los detenidos era solo "mediático", ya que su fin era denunciar la situación de la población en el este de Ucrania y ayudarles de "forma pacífica".
A los arrestados se les imputa la participación en delitos de asesinato, tenencia de armas y explosivos y actos que atentan contra los intereses y la neutralidad del Reino España en el exterior, según informó el Ministerio de Interior.
"No se puede acreditar ni un solo indicio de que ellos hayan cometido los delitos de los que se les acusa, es más, ellos han sido testigos de las barbaridades que se han cometido contra la población civil", responde Ibarrondo al ser preguntado por las acusaciones que pesan sobre los ocho jóvenes.
Para el abogado, "manifestar que han puesto en riesgo la neutralidad del Reino de España es absurdo".
Los detenidos se desplazaron a Ucrania durante el año 2014 y regresaron recientemente a España, según la información oficial.
En concreto, Arroyo confesó a esta agencia que estuvo en Lugansk desde octubre a diciembre de 2014, donde coincidió con otros españoles.
Este jueves solo declararán los tres detenidos residentes en Madrid; los otros cinco, de diferentes poblaciones de España, declararán por exhorto en juzgados próximos a sus domicilios en días posteriores.
