La ministra de Finanzas ucraniana resaltó en vísperas de la reunión con su homólogo británico, George Osborne, que Kiev todavía no ha recibido la ayuda financiera del Reino Unido a pesar de los suministros de armas no letales y el envió de instructores militares por parte de Londres.
Asimismo, Jaresko se mostró descontenta por el hecho de que EEUU y la UE están decidiendo quién de ellos debe prestar el mayor parte de la ayuda a Kiev.
"Los estadounidenses dicen que los europeos deben hacer más, mientras que los europeos dicen que los estadounidenses deben hacer más, son debates interesantes, pero el pueblo ucraniano es el que sufre más", señaló.
La crisis política en Ucrania afecta gravemente a su economía, el PIB de Ucrania se contrajo un 7,5% el pasado año y seguirá en descenso en 2015, según la prensa.
En cuanto a la moneda nacional, la grivna, se depreció un 41% frente al dólar, mientras que la inflación alcanzó el 24,9%, el máximo nivel de los últimos quince años.
Las autoridades del país esperan lograr la recuperación económica con la ayuda de los préstamos externos.
El pasado 11 de marzo el FMI anunció la aprobación de un nuevo programa de ayuda por cuatro años de 17.500 millones de dólares para el país eslavo, vinculado a un amplio programa de reformas económicas.
El 17 de marzo el Banco Nacional de Ucrania recibió el primer tramo de ayuda financiera del FMI por valor de 5.000 millones de dólares.