"La defensa territorial estará subordinada a una estricta vertical militar, ningún gobernador podrá tener sus propias Fuerzas Armadas de bolsillo", dijo el mandatario ucraniano.
Kolomoiski se presentó acto seguido en la sede de la compañía acompañado de un grupo de hombres armados con fusiles.
Se informó que supuestamente quería mostrar su desacuerdo con la destitución del presidente de esta compañía, Alexandr Lazorko.
El oligarca, gobernador además de la región de Dnepropetrovsk, catalogó los hechos de intento de traspaso ilegal de la empresa y acusó de lo ocurrido a un diputado del Bloque de Poroshenko.
Al abandonar la oficina de Ukrtransnafta, el multimillonario profirió insultos contra uno de los periodistas que lo esperaban a la salida.
Con un patrimonio estimado por Forbes en casi 1.800 millones de dólares, Kolomoiski es el número cuatro entre los ucranianos más ricos, además se le vincula con la creación y financiación de los batallones ultranacionalistas que combaten contra las milicias de Donbás.
La justicia de Rusia abrió una causa penal contra Kolomoiski por recurrir a métodos de guerra prohibidos.
La víspera un grupo anónimo ametralló a un efectivo del Consejo de Seguridad de Ucrania, tras lo cual fueron detenidos 11 participantes de un grupo armado privado por sospecha de haber perpetrado el crimen.
El jefe del Ministerio del Interior de Ucrania, Arsén Avakov, ha asegurado que los responsables del asesinato del oficial ya han sido descubiertos.