Entre los organismos que serían obligados a dimitir se encuentran el Consejo Regional de Járkov, el Consejo de la Ciudad y el propio alcalde de dicha localidad, aunque el texto del documento por ahora no ha sido publicado en el portal parlamentario.
El pasado jueves el Consejo Regional de Járkov se negó nuevamente por mayoría de votos a debatir el documento propuesto por los activistas ucranianos que pretende declarar a Rusia como país agresor.
Anteriormente, en febrero, este organismo estatal también se negó a estudiar dicha propuesta, ocasión en la que el alcalde de la ciudad declaró que Járkov es una ciudad fronteriza con Rusia y mantiene múltiples relaciones con dicho país.
El funcionario ucraniano se negó a discutir cuestiones políticas de ese tipo aún a pesar de que más de un mes atrás, el 27 de enero la Rada Suprema aprobó una declaración en la que se afirma que Rusia es un país agresor.
Las autoridades ucranianas han acusado reiteradamente a Moscú de injerencia en sus asuntos internos, cargo que Rusia rechaza y considera inaceptable.
Moscú afirma que está interesado en una solución política del conflicto ucraniano y en un desarrollo sostenido de la economía del país vecino.