"No importa de qué medidas se trata, afectan a todos los países (…) y hemos tenido muchas razones… para oponernos a ellas",
Anastasiadis hizo esta declaración al reunirse con su homólogo ruso, Vladímir Putin, que coincide en que las sanciones contra Moscú, así como las medidas tomadas en respuesta, hacen daño tanto a Rusia como a sus socios.
Las relaciones entre Moscú y Occidente empeoraron a raíz de la crisis en Ucrania y, en particular, tras la adhesión de Crimea a Rusia en marzo pasado que los países occidentales califican de "anexión ilegal".
EEUU y la UE aprobaron varios paquetes de sanciones contra Moscú que afectan tanto a particulares como a empresas concretas y a sectores enteros de la economía rusa. En respuesta, Rusia embargó por un año algunas importaciones alimenticias de EEUU, la UE, Australia, Canadá y Noruega.