"Unas elecciones deben garantizar el voto a todo el mundo, y si no es así, no se si se podrán celebrar", manifestó en un programa de la televisión pública de España (TVE) la responsable de Presidencia en el Gobierno catalán.
Budó explicó que el Ejecutivo regional está trabajando para encontrar "mecanismos y protocolos" que permitan "el voto y el acceso a la información de todo el mundo", a la par que "la preservación de la salud y la higiene".
Las elecciones al Parlamento de Cataluña se fijaron en el próximo año tras la inhabilitación a manos de la Justicia del expresidente independentista Quim Torra, un episodio que dejó a cargo del Gobierno interino a su vicepresidente, Pere Aragonès.
El último sondeo del Centro de Estudios de Opinión (CEO) de Cataluña, publicado este mismo 20 de noviembre, sitúa a la formación del vicepresidente, Esquerra Republicana de Catalunya (ERC), como primera fuerza en los comicios con un máximo de 37 diputados en la Cámara.
Estos resultados apuntan a que los tres partidos independentistas conseguirían de nuevo una mayoría absoluta en el Parlamento regional, con hasta 75 diputados de los 68 necesarios en el mejor de los casos y 70 en el peor, además de más del 50% de los votos.
En el contexto de incertidumbre por la pandemia, la encuesta prevé que la participación sea del 65% frente al 79% de las últimas elecciones regionales, que se celebraron en diciembre de 2017.