A partir de entonces, toda Cataluña estará ya en la última etapa de la desescalada de medidas por el coronavirus antes de que el 21 de junio se levante el estado de alarma en todo el país, según avanzó la cadena pública de la región (TV3).
El ministro de Sanidad español, Salvador Illa, aprobó personalmente la medida en una reunión bilateral entre su ministerio y el Departamento de Salud del Gobierno catalán.
Con el paso a la fase 3, el Gobierno de Cataluña recuperará las plenas competencias para regular el proceso de desescalada y la movilidad será libre entre todos los territorios de la región.
Además de la libertad de desplazamiento para todos los ciudadanos, la última fase permite a los bares y restaurantes ampliar sus espacios tanto en el interior y exterior, mientras que los hoteles podrán abrir sus zonas comunes para los clientes.
También podrán abrir bares de ocio nocturno y discotecas, aunque con un 30% del aforo y sin la habilitación de pistas de baile, así como teatros y cines.