En una comparecencia en el Congreso de los Diputados, Iglesias recordó que las nacionalizaciones "son perfectamente posibles en la Constitución Española".
Estas palabras de Iglesias llegan después de que Nissan comunicara el cierre de las tres plantas que tiene en la provincia de Barcelona, dejando sin trabajo a más de 3.000 empleados.
En adición, también este 28 de mayo la empresa estadounidense Alcoa anunció el despido de más de 500 trabajadores en una planta dedicada a la producción de aluminio en Galicia.
El Congreso de los Diputados reunió este 28 de mayo a la comisión encargada de diseñar un plan de recuperación del país tras la pandemia, un foro que fue utilizado por partidos nacionalistas de Galicia y Cataluña para plantear la nacionalización de estas plantas si finalmente se consuman los despidos.
En concreto, el portavoz de Esquerra Republicana de Cataluña, Gabriel Rufián, afirmó que la nacionalización de estas plantas sería "una gran solución"
Por su parte, Íñigo Errejón, portavoz de la formación progresista Más Madrid, calificó la marcha de Nissan como una "catástrofe laboral", pero también señaló la retirada de la compañía como una oportunidad para reorientar las capacidades de las fábricas y su plantilla a la producción de vehículos sostenibles.
En concreto, rechazó cualquier proyecto que implique "nacionalizar pérdidas para privatizar después los beneficios".
Tanto el Gobierno de España como la Generalitat de Cataluña se resistieron a aceptar como definitivo el anuncio de Nissan y solicitaron a la compañía japonesa a reconsiderar su decisión, por lo que la cuestión de la nacionalización por el momento sólo se plantea como un plan alternativo si se consuma el cierre.