"El PIB español registra una variación negativa del 5,2% en el primer trimestre de 2020 respecto al trimestre anterior", señala el Instituto Nacional de Estadística (INE) en un comunicado.
Antes de esta caída la economía española creció de forma estable un 0,4% en los tres trimestres precedentes (segundo, tercero y cuarto de 2019).
El único precedente comparable es el desplome del tercer trimestre de 2009, cuando la crisis financiera hizo caer la economía española un 2,6%, un retroceso que solo representa la mitad del retroceso actual.
Más allá del PIB, los datos del INE también muestran un retroceso histórico en cuestiones como el consumo de los hogares (-7,4%, porcentaje sin precedentes), horas trabajadas (-5%) exportaciones e importaciones (-8,4% en ambos casos).
Los datos publicados por el órgano estadístico también dan cuenta del esfuerzo de las administraciones públicas para hacer frente a la crisis, ya que mientras todos los sectores productivos retroceden, en este apartado el gasto se dispara un 1,8%, un incremento trimestral que no se daba desde 2007.
La actualización de la contabilidad española ofrecida por el INE confirma que España se dirige a una gran recesión, algo que ya se podía notar en las imponentes cifras de desempleo de los últimos dos meses o en las por hechas por organismos como el Banco de España, que pronostica una caída del PIB de entre el 6,6% y el 13,6% para 2020 en función de lo que dure el estado de alarma.
