El rey acompaña a la princesa Leonor en la entrega de los Premios Princesa de Girona 2019.
Es la primera visita del rey a Barcelona después de que se iniciaran el 14 de octubre unas protestas en Cataluña por la condena del Tribunal Supremo a varios dirigentes independentistas.
"Fuera el Borbón" gritaron grupos de manifestantes equipados con banderas independentistas y republicanas frente a la entrada del Palacio de Congresos de Barcelona, donde el Rey y su familia asistían a la entrega de los premios Princesa de Girona.
Desde primera hora de la mañana los accesos al recinto, situados en la Avenida Diagonal, quedaron blindados por un amplio dispositivo de los Mossos d'Esquadra para impedir a los manifestantes acercarse al recinto.
Horas antes del acto, que comenzaba a las 19:00 (hora local), centenares de personas se concentraron frente al cordón policial y gritaron consignas en contra del monarca y a favor del independentismo.
La mayoría de los asistentes a la protesta llevaron silbatos, cacerolas y otros utensilios que aporrearon durante horas como muestra de rechazo al monarca.
Algunos manifestantes también quemaron fotos del Rey, que accedió sin dificultades al evento junto al resto de la Familia Real.
"Estoy aquí para protestar contra el Rey porque nosotros opinamos que no tenemos rey, no nos representa. Sabemos que está en una reunión donde entregan unos premios y estamos haciendo todo el ruido posible para demostrar que no estamos conformes" dijo a Sputnik Aida, de 20 años, estudiante de la Universidad de Barcelona.
Los premios se celebraron tradicionalmente en la ciudad de Girona, donde el ayuntamiento declaró al monarca persona non grata en 2018.
El mismo año, el consistorio se negó a ceder un espacio para la entrega de los premios, argumentando que el lugar en cuestión estaba en proceso de obras.
En 2019, los organizadores decidieron cambiar el lugar de entrega de sus premios anuales a Barcelona, para coincidir con la celebración del décimo aniversario de la gala.