El canciller español, Josep Borrell, compareció ante el Congreso de los Diputados, donde reiteró que Madrid no pretende reconocer a Guaidó hasta que no se cumpla el plazo de ocho días —que corre desde el 26 de enero— otorgado a Nicolás Maduro para convocar unas nuevas elecciones presidenciales.
"Nicolás Maduro no es nada, no se le puede pedir que lleve a las elecciones libres, porque es un usurpador", dijo el portavoz del PP, principal partido de la oposición.
A ese respecto, Borrell respondió que España debe ser "responsable" y reconocer que Maduro todavía tiene los resortes administrativos para convocar esos comicios.
"Un gobierno en el ejercicio responsable de sus competencias no puede permitirse el lujo de ignorar la realidad del equilibrio de fuerzas que hay sobre el terreno, y que no puede cambiar por arte de magia", dijo el canciller.
También por el no reconocimiento inmediato a Guadió recibió críticas Borrell por parte del portavoz de la formación liberal Ciudadanos, Fernando Maura, que acusó al Gobierno español de ser "incoherente" y de "ponerse de perfil".
Pablo Bustinduy, portavoz de Podemos, afirmó que España tiene la capacidad de reconocer o no al gobierno de un país, pero opinó que ello no implica que se pueda mandar un "ultimátum" a un "país soberano" como Venezuela exigiendo la celebración de nuevas elecciones.
Durante su intervención, Bustinduy reprochó que España se plantee reconocer a "un presidente no electo" en un "país polarizado" donde "existe un riesgo real de que el enfrentamiento pueda derivar en una guerra civil o regional".
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A su modo de ver, en Venezuela está en marcha una "operación planificada para forzar un cambio de régimen por la fuerza" que debería ser condenada independientemente de las simpatías que pueda generar o no el actual gobierno en Caracas.
También desde el espectro ideológico de la izquierda, el diputado Joan Tardà, del partido independentista catalán ERC, reprochó a Borrell que España exija la celebración de elecciones libres en Venezuela y no en otros países carentes de comicios democráticos, como Arabia Saudí.