"Queremos impulsar un plan para terminar con los aforamientos. El reto es que los ciudadanos vuelvan a creer en la política", explicó el Jefe del Ejecutivo.
Según el presidente del Gobierno, la reforma implica "un cambio en la Constitución", que pretenden que esté lista en 60 días.
En España hay más de 17.000 personas aforadas. La mayoría son políticos o miembros de las distintas instituciones públicas, pero también se suman jueces o fiscales.
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Este plan solo será posible si se realiza una reforma constitucional, que requiere una mayoría de dos tercios en el Congreso, 233 de los 350 diputados.
"Si la Constitución se puede modificar de urgencia para el tema de los aforados o por el déficit cero, también debería aprovecharse para incluir el derecho de autodeterminación", dijo en rueda de prensa Marta Vilalta, portavoz de ERC.
Del mismo modo, el partido de izquierdas Podemos —que se integra dentro de la coalición Unidos Podemos, tercera fuerza en número de diputados en el Congreso— manifestó que, en su opinión, el proceso de reforma constitucional debe ser aprovechado para abordar la cuestión territorial.
"Si se abre la Constitución hay que ir más allá", dijo en rueda de prensa Noelia Vera, portavoz de Podemos.
"Saludamos la medida con alegría, pero hay que ser más exigentes", añadió.
Por su parte, el partido liberal Ciudadanos —cuarta fuerza en escaños— expresó su "satisfacción" por la iniciativa de Sánchez para eliminar los aforamientos, una cuestión que en su opinión debe ser abordada de forma urgente porque la sociedad española "ya no aguanta más".
