Puigdemont duda que la situación en Cataluña vaya a cambiar con Pedro Sánchez

MADRID (Sputnik) — El expresidente del Gobierno catalán, Carles Puigdemont, admitió que el discurso del nuevo presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, le agrada más que el de su predecesor, Mariano Rajoy, pero se mostró escéptico sobre que sus palabras vayan a traducirse en medidas que ayuden a producir un clima de distensión.

En una entrevista concedida a la radio RAC1, Puigdemont aseguró que "el discurso de Pedro Sánchez suena bien" y "cambia mucho" respecto al de Rajoy, pero destacó que "los discursos no hacen política".

"El nuevo Gobierno de Pedro Sánchez ha generado expectativas por encima de sus posibilidades", dijo el líder independentista antes de subrayar que "lo que importa son las políticas" y remachar que "de momento Rajoy se marchó, pero sus políticas no".

En ese sentido, recordó que "Sánchez no anunció la reversión de ninguna de las medidas de Rajoy respecto a Cataluña".

Además, Puigdemont afirmó que la composición del Gobierno de Sánchez, con nombramientos como el de Josep Borrell como ministro de Exteriores, no ayuda a crear un clima de diálogo.

Borrell, conocido por su férrea oposición al independentismo, despierta el rechazo de los sectores separatistas, sobre todo después de que en la campaña electoral para las últimas elecciones autonómicas afirmara que era necesario "desinfectar" Cataluña.

"Josep Borrell se ha caracterizado por mantener una actitud ultra agresiva y no ha rectificado. Es un ultra, muy radical", dijo Puigdemont.

Pese a manifestar su desacuerdo con el nombramiento, Puigdemont dijo "estar dispuesto a entender que una cosa son los perfiles personales y otra las políticas que se hagan".

Preguntado por la posibilidad de que Pedro Sánchez mantenga una reunión en las próximas semanas con el presidente del Gobierno catalán, Quim Torra, Puigdemont dijo que "un encuentro inmediato sería una buena noticia".

La voluntad de diálogo del independentismo ante Sánchez, prosiguió Puigdemont, no supone, no obstante, una renuncia a su reivindicación sobre la celebración de un referéndum pactado con Madrid o al reconocimiento de los resultados de la consulta del 1 de octubre.

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"La prioridad siempre es un diálogo y la negociación para llegar a un acuerdo con el Gobierno", dijo el líder independentista, que insistió en su deseo de "fundar un país en excelentes relaciones con nuestros vecinos".

En lo referente al referéndum celebrado el pasado 1 de octubre, declarado ilegal por el Tribunal Constitucional pero utilizado por los sectores separatistas para adoptar posteriormente una declaración de independencia, Puigdemont afirmó que "Cataluña ya declaró su independencia".

Sin embargo, admitió que todavía no es una república independiente porque la comunidad internacional no la reconoció como tal.

Partiendo de esa base, Puigdemont invitó al nuevo Gobierno catalán a agotar todas las vías posibles para hacer efectiva esa república independiente, lo que pasa por no renunciar a la celebración de otro referéndum si se dan las condiciones para pactar con Madrid.