"Dimita y esta moción de censura habrá terminado aquí y ahora", dijo el líder socialista, que calificó a su contrincante como un jefe del Ejecutivo que mantiene "su obstinación de aferrarse al cargo hasta las últimas consecuencias, sufra quien sufra".
El político socialista dijo que los casos de corrupción del partido en el Gobierno de España "provocan bochorno e indignación" y "exigen una respuesta contundente" que ponga fin a la "sensación de impunidad" de los responsables políticos.
Para Sánchez, la "sola permanencia" de Rajoy en el cargo es "dañina" y "debilita la democracia" española en un momento en que se enfrenta a retos como la "cohesión territorial" y su "imagen internacional".
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El político socialista cargó contra el líder conservador, de quien dijo que sometía al hemiciclo a un "chantaje" ofreciendo "una estabilidad manchada de corrupción".
"No se puede elegir", sentenció Sánchez, "no hay mayor inestabilidad que la que emana de la corrupción", una "enfermedad" que el Gobierno español "pretende curar mirando a otro lado".
En su discurso, Sánchez elogió de manera destacada a los funcionarios y "servidores públicos" que "no se dejan intimidar" y suponen "el último dique de contención al servicio de la democracia".
Los cuatro puntos del programa que presentó Sánchez son "la estabilidad institucional, la estabilidad macroeconómica y presupuestaria, la estabilidad social y ecológica, y la estabilidad territorial", comprometiéndose a mantener los presupuestos generales aprobados por la cámara y "los compromisos derivados de este país como Estado miembro de la Unión Europea".
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Sánchez, que también se refirió "a la manipulación en RTVE" [radiotelevisión pública española], reivindicó al fin el "patriotismo cívico" y, dirigiéndose a los diputados, "especialmente a aquellos que decían que iban a regenerar la vida política" —en referencia a la formación progresista Podemos y al partido liberal Ciudadanos (C's)— les apeló a ejercer "su responsabilidad última" para que "abran una ventana de esperanza" para construir "una democracia sana, fuerte y ejemplar".
La moción llega como consecuencia de la sentencia dictada el 24 de mayo por la Audiencia Nacional de España, que condenó al Partido Popular (PP) —la formación que preside el jefe del Ejecutivo español— como partícipe a título lucrativo en la trama corrupta Gürtel, en la que resultaron condenados 29 de las 37 personas acusadas, acumulando penas por un total de 351 años de cárcel.
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La sentencia concluye que la actividad de la citada trama produjo "beneficios cuantificables al Partido Popular", por lo que considera que la formación conservadora "debe ser condenada como partícipe a título lucrativo".
