Se trata, según informó la entidad a través de un comunicado el 22 de marzo, de una acción de protesta por la retención de su barco en el puerto de Pozzallo (Italia), luego que la Fiscalía de Catania acusase a la ONG de favorecer "la inmigración clandestina" y constituir una "asociación criminal".
Además, el 24 de marzo habrá una concentración en Pozzallo de voluntarios italianos que han participado en misiones de Proactiva Open Arms.
El barco de la ONG española llegó a las costas italianas luego de recoger a 218 migrantes en el mar, que se negó a entregar a una patrulla libia, tras lo cual puso rumbo a aguas internacionales y posteriormente italianas.
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Frente a las acusaciones de la Fiscalía, la ONG defiende que proteger vidas humanas debe ser una prioridad de cualquier cuerpo, ya sea civil o militar, y que entregar a los rescatados a Libia "equivale a llevar una devolución en caliente", lo que contraviene el Estatuto de los Refugiados de la ONU.