El estudio del observatorio, con sede en Lisboa, analizó las aguas residuales de sesenta ciudades europeas para deducir, a partir de los rastros de drogas en la orina, los hábitos de consumo de sus habitantes.
Zúrich sigue a la ciudad española, con 934,4 miligramos por cada 1.000 personas al día.
Algunas capitales como Madrid o Londres no están incluidas en el estudio, que tampoco analiza algunos tipos de drogas, como el cannabis.
El informe lleva por título 'Análisis de las aguas residuales y drogas: un estudio en varias ciudades europeas' y se trata según sus autores del "mayor proyecto europeo realizado hasta la fecha en relación con la emergente ciencia del análisis de las aguas residuales".
Los investigadores sostienen que "el consumo de cocaína es más elevado en las ciudades europeas occidentales y meridionales, concretamente en ciudades de Bélgica, España y el Reino Unido", mientras que "es entre muy bajo e insignificante en la mayoría de las ciudades de Europa oriental", donde se consume más metanfetamina.