"Es la primera vez que viniendo a votar tan temprano me encuentro con tanto tiempo de espera para votar", relata a Sputnik Manuel, un vecino del céntrico barrio barcelonés de San Antoni, que aguarda su turno para votar en la biblioteca municipal.
Sin embargo, todos ellos apuntan a que no se puede concluir que esta sensación a primera hora se vaya a traducir en una participación alta, sobre todo si se tiene en cuenta que la votación se produce en un jueves laborable, lo que no es habitual en España.
"Yo he venido a votar a la apertura porque después me tengo que ir a trabajar y no tendré más tiempo en todo el día, algo que creo que le pasará a mucha gente. Cuando las elecciones son en domingo vengo a mediodía, con más calma", apunta Clara, votante en la biblioteca municipal de San Antoni.
La mayoría de sondeos electorales auguran una participación histórica en estos comicios, incluso superando el récord establecido en las elecciones catalanas de 2015.
"La gente está muy movilizada tanto en el independentismo como en el unionismo, sabemos que atravesamos una situación muy difícil y nadie quiere perder", señala Manuel, que acude a votar con un lazo amarillo de apoyo a los presos independentistas.
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La votación se produce en un clima de excepcionalidad después de que la mayoría independentista del Parlamento de Cataluña declarase la independencia del territorio el 27 de octubre, lo que fue contestado desde Madrid con la disolución de los órganos de autogobierno catalán y la convocatoria de estos comicios.
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La mayoría de los sondeos publicados sugieren que la suma de las fuerzas independentistas podrá alcanzar la mayoría absoluta en la cámara, aunque todas las encuestas coinciden en señalar que la votación será muy reñida.
El cierre de los colegios electorales tendrá lugar a las 20.00 (hora local).
