Los magistrados del TC tomaron esta decisión de manera unánime tras admitir a trámite el recurso presentado por el Gobierno de Mariano Rajoy contra la reforma de la cámara legislativa catalana.
La activación de esta vía buscaba limitar la capacidad de actuación del Gobierno central y el Tribunal Constitucional a la hora de paralizar la tramitación de las llamadas leyes de desconexión, entre las que se encuentran la del referéndum o la de transitoriedad jurídica.
Sin embargo, no está claro que los representantes independentistas vayan a acatar la suspensión.
"La democracia en Cataluña no será detenida ni por Rajoy ni por el Tribunal Constitucional", dijo en rueda de prensa Lluís Corominas, presidente del grupo parlamentario de Junts Pel Sí, la coalición independentista que gobierna en Cataluña.
La providencia del TC comunica a las autoridades catalanas que tienen "el deber de impedir o paralizar cualquier iniciativa que suponga ignorar o eludir la suspensión acordada".
Por el momento el Tribunal Constitucional no hizo pública la providencia sobre la suspensión de la reforma del Parlamento catalán, por lo que se desconocen sus argumentos jurídicos.
No obstante, es previsible que estos se encuentren en línea con los esgrimidos por el Ejecutivo.
Según explicó Rajoy, el recurso presentado por el Gobierno contó con el aval del Consejo de Estado, que ve en la reforma de la cámara catalana una vulneración del derecho a la participación política de la minoría parlamentaria.
En la providencia emitida este 31, el Tribunal Constitucional detalló que la admisión a trámite del recurso no supone la validación de los argumentos de la demanda ni adelanta el pronunciamiento definitivo sobre el fondo de la cuestión.