Según afirmó Rajoy en uno de sus turnos de réplica, la desigualdad en España "ha comenzado a corregirse" aunque aún "falta mucho por hacer".
El líder del Ejecutivo español considera que "el origen de los problemas" de España en materia de desigualdad se encuentra en los 70.000 millones de euros en recaudación que perdió el Estado durante la crisis económica y en el descenso de diez puntos del PIB que se produjo en esa época.
A pesar de ese contexto adverso a su llegada al Gobierno en 2011, Rajoy cree que su desempeño al frente del ejecutivo supo hacer frente a la amenaza de la pobreza y de la exclusión social llevando a un periodo de reducción de la desigualdad que "todavía continua" según reflejan "todos los índices nacionales e internacionales"
La OCDE destacó que España empeoró en los últimos años en el índice Gini, que mide la distribución de la renta en la sociedad partiendo de cero como valor de igualdad absoluta y uno como la desigualdad total, pasando de un 0,324 en 2007 a un 0,346 en 2014.