En el avión viajaban el director de Military Aircraft de Airbus Defence and Space y presidente de Airbus España, Fernando Alonso, como ingeniero de vuelo.
El A400 había despegado poco antes de Toulouse, al sur de Francia.
El test se produce horas después de que el ministro español de Defensa, Pedro Morenés anunciase que retira temporalmente el permiso de vuelo a las unidades del avión A400M.
Alemania, Reino Unido y Turquía también han decidido paralizar sus operaciones con los A400M.
Pero el presidente de Airbus España afirmó tener la "máxima confianza" en la aeronave.
"Debemos demostrar nuestra profesionalidad a pesar de nuestro dolor", aseguró.
Los directivos ya anunciaron ayer la realización de este vuelo de pruebas.
La rapidez con la que han reaccionado los directivos de Airbus intenta aplacar los rumores de que el programa podría suspenderse hasta que se conozcan exactamente las causas del accidente en Sevilla.
El A400M es el avión militar de hélice más grande del mundo.
El proyecto nació en 2003 tras el acuerdo alcanzado por siete países (Alemania, Francia, España, Reino Unido, Turquía, Bélgica y Luxemburgo) que se comprometieron a comprar 180 unidades con una inversión inicial de 20.000 millones de euros.
Su producción industrial empezó en 2011.
En España hay más de 1.000 personas que dependen de este ambicioso programa de Defensa y más de 8.000 que trabajan para esta industria aeronáutica en Andalucía.