En su escrito de defensa, Diego Torres, vuelve a alegar que "jamás se hizo nada sin antes haber informado" a la Casa Real, en un nuevo intento de implicar a la monarquía española en sus negocios.
"Siempre" se operó "con absoluta transparencia", asegura el escrito presentado por su abogado en el que insiste en que "es imposible sostener" que, "con el ejército de asesores" de la Casa Real, "que intervenían de manera activa y determinante", pudieran Torres y su esposa, Ana María Tejeiro, "tener la más leve sospecha de que algo de anómalo pudiera estar llevándose a cabo".
Según el escrito de defensa "desde el día de su constitución el único administrador de Aizoon fue Don Iñaki Urdangarin, estando completamente al margen de la dirección y gestión cotidiana de la compañía" la Infanta, que hoy vive apartada en Ginebra.
El juez José Castro de Palma de Mallorca abrió el pasado 22 de diciembre un juicio contra 17 acusados por el caso Nóos.
El magistrado consideró que el papel de Cristina de Borbón, hija de Juan Carlos, fue "imprescindible" para que su marido defraudase a Hacienda 337.138 euros.
En el auto se acusa a Urdangarin y a Torres por "prevaricación administrativa, malversación de caudales públicos, fraude a la Administración, tráfico de influencias, blanqueo y dos delitos contra la Hacienda Pública".
Torres y Urdangarin están acusados de malversar más de seis millones de euros de dinero público de Baleares, Comunidad Valenciana y Madrid.
Urdangarin se enfrenta a penas que van de los 19 a los 26 años de cárcel y una multa de 3,5 millones de euros. La petición contra Torres es de 15,6 años de cárcel.
Según Torres, la "idea original" de Noos para impulsar proyectos, mecenazgos y estudios se trabajó con la tutela directa de la Casa del entonces Rey Juan Carlos, hoy jubilado, y con el respaldo de la prestigiosa escuela de negocios Esade.
Torres cree totalmente lícitos y honrados sus negocios e insiste que no se puede sostener que el entorno real "no estuviera al tanto de todo y, precisamente por su intervención directa, velara por la bondad del quehacer", señala en su escrito.
"Sí que es cierto que aunque la Casa Real no era socio, sí que supervisaba, validaba y aprobaba el desarrollo de su objeto social, sin cuyo plácet nada de acometía", puntualiza.
El escrito de defensa de Torres incluye además unas 500 páginas con correos comprometedores, muchos hasta ahora inéditos.
Entre esos mensajes se encuentra uno cercano al ridículo que revela las gestiones que hizo Urdangarin para conseguir zapatillas gratis de Reebook para toda la familia.
Varios correos de junio de 2004 recogen como Reebok Spain le ofreció unas zapatillas edición especial para los Juegos Olímpicos con la bandera española.
El duque movilizó los servicios de la Zarzuela para hacerse en pocos días con las tallas de pie de toda la Familia Real.
Acaba pidiendo trece pares gratis en total. Desde el número 47 para su ex cuñado Jaime de Marichalar, entonces casado con la infanta Elena, o para él mismo y hasta un 25 para su hijo Miguel.
