La bajada es mayor que la que se vivió en 2012, un 0,3%, cuando el Gobierno de Mariano Rajoy eliminó la paga extra de los funcionarios públicos.
Estos salarios afectan a las compañías que mueven un negocio de más de seis millones de euros.
El informe señala que por primera vez desde el inicio de la crisis económica, la facturación de las grandes empresas creció el pasado año, tras seis años consecutivos de descensos, lo que ha llevó a una mayor contratación de personal, al mismo tiempo que se reducían los emolumentos.
En marzo, se conocerá la estadística general de salario, pero todo indica que la bajada salarial será incluso mayor que la de las grandes compañías.
Sindicatos y patronal mantuvieron ayer su segundo encuentro de máximo nivel para intentar cerrar un pacto salarial con un aumento del 1%, frente al 0,6% que se pactó para 2014.
Organismos internacionales como la OCDE han pedido a España que acabe con la política de reducción salarial para poder impulsar el consumo interno.