El rey acudió hoy al Senado para conmemorar, como cada 27 de enero, el Día de la Memoria del Holocausto y la prevención de los crímenes contra la humanidad, que este año coincidió con el 70 aniversario de la liberación del campo de exterminio de Auschwitz.
"Nada ni nadie es capaz de aliviar el dolor que nos produce la mirada a los trágicos episodios que rasgaron la Europa y el mundo de mitad del siglo XX", dijo el monarca en una ceremonia muy institucional, en donde representantes de la comunidades judías y gitanos alertaron que "el Holocausto no ha terminado todavía".
La "barbarie", advirtió el Felipe VI, puede surgir en el momento y de la forma más inesperada.
El monarca hizo alusión a los atentados de Francia y "los que desgraciadamente están ocurriendo en muchos países, sobre todo en África y Oriente Próximo".
"Ninguna sociedad está definitivamente protegida frente a la sinrazón", señaló.
El Holocausto representa, en opinión del jefe del Estado, "una derrota sin paliativos de la maldad".
El Rey rindió homenaje a los siete españoles que fueron nombrados 'Juntos entre las Naciones'.
"España aportó héroes, como los mencionados, pero también se desangró con las víctimas", afirmó el Rey en recuerdo a "los miles de sefardíes asesinados en los campos y a los exiliados republicanos españoles".