Según explican los expertos de la NASA, Florence —con sus 4,4 kilómetros de diámetro— es uno de los cuerpos celestes más grandes que se han acercado a la Tierra a lo largo de su historia. Sin embargo, la distancia entre el bólido y nuestro planeta —siete millones de kilómetros— significa que Florence no representa ninguna amenaza.
Asimismo, los especialistas señalan que es posible predecir el 'comportamiento' de los asteroides con décadas de anticipación.
Entretanto, la distancia de siete millones de kilómetros es suficiente para que los astrónomos puedan analizar el asteroide en detalle y recopilar datos más precisos acerca de sus características.