"Los especialistas de Energia y el Centro Espacial Yuzhni preparan una nave espacial pilotada de transporte de nueva modificación Soyuz MS-04 para las pruebas de hermeticidad en la cámara de vacío del cosmódromo de Baikonur", señala el comunicado difundido por la empresa.
Las tripulaciones rusas mantendrán esta composición limitada hasta que entre en marca el nuevo módulo de laboratorio multifuncional Naúka (Ciencia), previsto para fines de 2017.
Las plazas libres podrán ser ocupadas por astronautas estadounidenses.
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Por ello la NASA firmó un contrato con la Boeing para la compra de cinco plazas adicionales en los Soyuz, dos para 2017 y 2018, y tres para 2019, en caso de que las naves Boeing CST-100 Starliner, en las que están previstos los vuelos de estos astronautas, no estén todavía listas para llevar a las tripulaciones a la EEI.
Casi todas las tripulaciones que volaban en las naves anteriores a esta también estaban conformadas por tres personas.
Las pruebas se llevarán a cabo en la cámara de vacío 17Т523М, puesta en marcha tras la reconstrucción general realizada en 2016.
Por primera vez una cámara con una capacidad cercana a los 1.000 metros cúbicos fue usada a fines de 1987 para las pruebas de hermeticidad de las secciones grandes y los sistemas neumáticos e hidráulicos de las naves orbitales rusas Burán.