"El ministro Aguad fue citado pero todavía no se presentó ni por escrito ni por persona", afirmó Tagliapietra, querellante en la causa.
El funcionario, que sólo apareció públicamente una vez desde que se extravió el navío hace 19 días, ni se ha presentado ante la magistrada, cuyo juzgado se encuentra en la localidad santacruceña de Caleta Olivia (sur), ni ha contestado por escrito sus solicitudes, certificó Tagliapietra, que como abogado y querellante tiene acceso al expediente.
El padre del teniente de corbeta Alejandro Damián Tagliapietra, de 27 años, se constituyó como querellante junto a otras siete familias para acceder al sumario de la investigación, que indaga sobre lo sucedido con el navío de la Armada argentina, luego que el 15 de noviembre comunicara su última posición a 432 kilómetros de la costa, a la altura del Golfo de San Jorge.
"En ese marco actúa la jueza [Marta] Yáñez, que por jurisdicción respecto de donde fue el último punto de comunicación le corresponde la causa penal", aclaró el abogado.
Por ello "esperamos que a la brevedad no sólo declare sino que nos remita toda la documentación solicitada", exigió.
El ministro Aguad, sin experiencia previa en Defensa, compareció públicamente por única vez el pasado 27 de noviembre, cuando viajó a Puerto Belgrano, a 1.750 kilómetros al sur de Buenos Aires, donde se coordina la búsqueda del buque desaparecido.
Medidas de prueba
En paralelo, el 29 y el 30 de noviembre la magistrada se reunió con Tagliapietra en dos encuentros extensos en los que también participaron su secretario y el fiscal, y en el cual consensuaron "los pasos a seguir", informó.
"Gratamente estamos en coincidencia plena al respecto [de lo que hacer]: salvaguardar todas las pruebas y no descartar ninguna hipótesis", describió Tagliapietra.
Los querellantes aportaron algunas pruebas materiales, como una foto del interior del submarino que envió uno de los tripulantes del buque a su esposa y en la que se ven "características de dónde dormían [los marinos] y [en] qué condiciones, en el piso, al lado de las baterías" detalló.
El Gobierno accedió a levantar el secreto militar para que los marinos puedan aportar información sobre lo sucedido.
"Estamos abocados a seguir reuniendo lo necesario para averiguar la verdad", afirmó el abogado en diálogo con esta agencia.
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La Armada suspendió el 30 de noviembre el operativo Estado de Búsqueda y Rescate (SAR por sus siglas en inglés) vigente desde el 17 de noviembre para dar con el paradero de la nave.
"Después de la decepción que nos propinó el hecho de que cancelaran el protocolo SAR, estamos concentrados en la investigación judicial de la cual somos querellantes para averiguar qué sucedió antes de que zarpara el submarino y después, hasta tratar de entender qué pasó finalmente", concluyó el progenitor del teniente de corbeta a bordo del submarino.
El 4 de diciembre se espera en la zona de búsqueda la llegada del buque ruso Yantar, que viene equipado con material para rastrear el fondo del mar hasta los 6.000 metros de profundidad.
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