Es oficial, las consolas Xbox One X, comercializada desde 2017, y Xbox One S All-Digital Edition, lanzada en abril del año pasado, pasarán a la historia muy pronto a pesar de ser relativamente nuevas.
"En un salto hacia el futuro de la mano de la Xbox Series X, vamos a dar el paso natural de detener la producción de Xbox One X y Xbox One S All-Digital Edition", ha declarado un representante de Microsoft para el medio The Verge. Sin embargo, recalca que la consola Xbox One S seguirá vendiéndose en todo el mundo.
No obstante, el medio especializado en tecnología comunica que es probable que siga habiendo unidades de estas consolas en stock en los próximos meses. A ese respecto, un representante de Microsoft dice que "los jugadores pueden consultar a sus distribuidores locales para obtener más detalles sobre la disponibilidad del dispositivo Xbox One".
Microsoft planea continuar con su programa de suscripciones Xbox All Access de cara a la salida de la Xbox Series X, que se producirá dentro de unos meses. Así, los suscriptores podrán pasarse a la nueva consola.