La celebración nació en 1996 en Estados Unidos, cuando la consultora Playfair decidió dedicar un día a resaltar la importancia de la diversión en el ambiente laboral.
Pero vamos a lo que importa. Desde Sputnik te dejamos algunas ideas para divertirte en tu trabajo, mientras continuamos testeando nuevos juegos en la redacción.
Bowling con botellas
Consumir agua durante la jornada laboral es esencial. Una práctica sana que además siempre deja un buen arsenal de botellas vacías en la oficina. ¿Por qué no juntarlas, ponerlas en formación e intentar atinarles con otra botella o bola para ver quién es el as del bowling en la empresa?
Carreras con sillas
A veces, los trabajadores no son conscientes de todos los usos que tienen sus costosas butacas. Es hora de ponerlas a prueba. Entre todos definan un circuito y una línea de meta y ¡a correr!
Coreografías en el trabajo
Para este juego es bueno dividir a la plantilla en equipos. Cada uno elegirá una canción e intentará sorprender a los demás con una divertida y desenfadada coreografía. Una dinámica sumamente divertida y que siempre sirve para descubrir algún talento oculto en la oficina.
Juegos de roles
Si hay alguien a quien terminamos conociendo más que a un familiar, es a un compañero de trabajo. Así que cualquiera suele estar preparado para "actuar" como alguno de ellos en este interesante juego de cambio de personalidad. Los que saben dicen que esta dinámica también sirve para mejorar el ambiente y superar alguna diferencia que pueda existir en el grupo.
En la serie The Office, el personaje de Michael Scott propone un juego del estilo, aunque no resulta tal cual él lo planeó.
¡Guerra!
En este juego sí es fundamental que haya (al menos) dos bandos. Estruja esos papeles que ya deberías haber descartado hace tiempo y crea tu propio arsenal de bolas de papel. Escritorios, sillas y otros muebles pueden servir como perfectas trincheras desde la cual atacar a los otros. Un golpe en la cabeza elimina al rival y gana quien quite de la batalla a todo el bando contrario o quien acabe dándole al jefe en un descuido.