El producto interno bruto de la región disminuirá un 0,7% en 2020. Antes los economistas pronosticaban que se registraría un crecimiento del 0,1%. Será la primera contracción desde 1962, comunicó a Bloomberg Yasuyuki Sawada, economista en jefe de la entidad financiera.
La expansión del coronavirus en los países asiáticos causó una mayor desaceleración económica que las crisis anteriores, y hará que las tres cuartas partes de las economías de la región se contraigan a finales del 2020. Por ejemplo, el PIB de la India podría registrar una contracción del 9%, frente al 4% previsto anteriormente. Las economías de Filipinas y Tailandia también corren el riesgo de sufrir grandes descensos del 7,3% y del 8% respectivamente.
China tal vez sea el único Estado de la región que no seguirá esta tendencia. Se espera que su economía crezca un 1,8%. Este pronóstico es el mismo que el de junio, comunicaron los economistas del Banco Asiático de Desarrollo. Además, los analistas del ente prevén que el crecimiento económico del país asiático acelere en 2021 hasta alcanzar el 7,7%, lo que estará por encima de la previsión anterior del 7,4%.
"Dicho esto, nuestra hipótesis de base es que los riesgos para la salud serán básicamente contenidos este año".
El estímulo fiscal a gran escala ha ayudado a amortiguar el golpe de la pandemia y ha proporcionado una base para que se produzca un rebote, enfatizó el interlocutor de la agencia. Gracias a todos los esfuerzos el crecimiento económico en los países en vías de desarrollo de Asia —entre los que no figuran naciones desarrolladas como Japón, Australia y Nueva Zelanda— podría recuperarse hasta alcanzar el 6,8% en 2021.
Pese a esta mejora el PIB de estos países mostrará una dinámica que estará por debajo de los pronósticos anteriores a la crisis sanitaria. Por ello, es posible que la recuperación sea "parcial y no completa", resumió el experto.
Las medidas adoptadas para contener la expansión del virus no representarán el único riesgo para la economía de Asia. Las tensiones comerciales entre Estados Unidos y China y los conflictos tecnológicos serán otras vulnerabilidades financieras que pesarán sobre el crecimiento económico de la región en medio de la pandemia, agregó Sawada.
