De acuerdo con el ejecutivo, la industria de gas de esquisto de EEUU enfrenta una crisis.
El ejecutivo agregó que "una caída de los precios del petróleo también puede afectar negativamente la producción de gas de esquisto.
"Una reducción en la actividad de los productores estadounidenses de petróleo de esquisto repercute directamente en la producción de gas, pues una parte significativa del gas de esquisto producido en EEUU corresponde al gas asociado de petróleo", afirmó.
En cuanto a China, la producción del gas de esquisto en el país crecerá hasta 50.000 millones de metros cúbicos, pero menos de lo pronosticado por el Gobierno chino que preveía extraer entre 80.000 hasta 100.000 millones de metros cúbicos antes del 2030, agregó Aksiutin.
A diferencia de Estados Unidos, donde el gas de esquisto representa dos tercios de la producción de gas, este combustible tiene una presencia mucho más modesta en el balance total de China, ya que lo producen solo dos empresas estatales —CNPC y Sinopec— mientras que los inversores privados no se atreven a emprender tales proyectos, señaló.
Además, el gas de esquisto en China se extrae de momento en un solo yacimiento, en la provincia de Sichuan, remarcó el ejecutivo.