"Disminuimos la extracción de petróleo en noviembre en 195.000 barriles diarios (...) El recorte fue del 85,5% de la cifra planeada", dijo Nóvak.
El país euroasiático se había comprometido a recortar su producción de 11,42 millones de barriles diarios (b/d) a 11,19 millones, lo que supone una disminución de 228.000 b/d.
La estadística rusa, además del petróleo, toma en cuenta el condensado del gas, cuya extracción se disparó en los últimos meses.
Nóvak subrayó que en diciembre Rusia tratará de cumplir al 100% lo pactado con la OPEP.
A finales de 2016, la OPEP y en aquel momento 11 productores independientes —Azerbaiyán, Bahréin, Brunéi, Guinea Ecuatorial (miembro del cartel desde mayo de 2017), Kazajistán, Malasia, México, Omán, Rusia, Sudán y Sudán del Sur— acordaron en Viena reducir la producción conjunta en 1,8 millones de barriles diarios.
El convenio, que busca estabilizar los precios del hidrocarburo, fue prorrogado en varias ocasiones, la última el pasado 2 de julio, cuando la OPEP y sus socios independientes se comprometieron a rebajar la producción en su conjunto en 1,2 millones de barriles diarios respecto a los niveles de octubre de 2018 hasta el 31 de marzo de 2020.