Tras el anuncio de Donald Trump sobre los nuevos aranceles a los productos chinos, el gigante asiático devaluó su moneda hasta el punto de romper la barrera psicológica de los 7 yuanes por dólar estadounidense. Si bien el 4 de agosto la tasa de cambio estaba a 6,94 yuanes, ya para el 5 de agosto se cotizaba a 7,04 yuanes por dólar.
Por el contrario, los activos de refugio, como el yen japonés, los bonos del Tesoro de Estados Unidos y el oro, incrementaron su valor.
"Es uno de los peores escenarios. Primero caen los mercados, luego Trump se despierta y todo esto se pone peor", dijo Michael Every, jefe de investigación de los mercados financieros asiáticos del Rabobank, ubicado en Hong Kong.
Anteriormente, el Ministerio de Exteriores de China ya había informado que Pekín tomaría contramedidas si Washington imponía aranceles adicionales sobre sus productos por un valor de 300.000 millones de dólares a partir del 1 de septiembre.
A su vez, Trump anunció el 1 de agosto que a partir del 1 de septiembre EEUU pasaría a "aplicar una pequeña tarifa adicional del 10% a los restantes 300.000 millones de dólares en bienes" que importa desde China, al tiempo que continúan las negociaciones comerciales entre ambos países.