"Una fuente china confirmó que los negociadores estadounidenses regresarán a Pekín la semana que viene para discutir los detalles", escribe el diario.
La fuente del periódico señaló que China quiere cerciorarse de que la Casa Blanca cumpla la promesa dada por el presidente Donald Trump de suavizar el bloqueo de la venta de componentes a la compañía china Huawei. Solo después de ello, Pekín se comprometerá a comprar productos agrícolas estadounidenses.
"Si los dos países no pueden resolver este problema, las negociaciones se interrumpirán de inmediato y Washington impondrá nuevas sanciones a las exportaciones chinas por 300.000 millones de dólares", afirmó.
Trump se reunió con su homólogo chino, Xi Jinping, a finales de junio, al margen de la cumbre del G20 celebrada en Japón.
Washington y Pekín se enfrascaron en una guerra comercial después de que el presidente Trump anunciara en junio de 2018 la imposición de aranceles a las importaciones chinas con el fin de reducir el déficit comercial.
Ambos países se han impuesto desde entonces varias baterías de aranceles recíprocos, la más reciente, en junio.
El 1 de junio, China incrementó del 5 al 25% las tasas a las mercancías estadounidenses por valor de 60.000 millones de dólares, varias semanas después de que EEUU elevara del 10 al 25% los aranceles a las importaciones chinas.