La estrategia prevé dividir el país más grande del mundo en 14 macrorregiones, algo que debería garantizar mejores condiciones para la cooperación interregional. Pero la meta principal es "la intensificación del potencial económico de las regiones", lo que debería garantizar el 65% del crecimiento económico del país para el año 2035.
A día de hoy, en Rusia ya existen dos macrorregiones económicas, una en el Lejano Oriente y otra en el Cáucaso Norte. Cada una de las otras 12 obtendría su propio centro regional de desarrollo económico. La división tendría en cuenta la infraestructura de comunicación y transporte entre las regiones.
La iniciativa se está discutiendo en el Gobierno y de acuerdo con el plan su aprobación se debería realizar en noviembre de 2018.
No obstante, no todo los funcionarios del país han expresado su apoyo al plan ministerial. Así, el representante del presidente en el Distrito Federal de Siberia, Serguéi Meniailo, apunta que, al contrario de lo esperado, la iniciativa podría debilitar la integración regional.
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"La creación en el distrito [federal de Siberia] de tres nuevas regiones conllevará la debilitación del proceso de integración regional, fortalecerá los problemas de desarrollo de Siberia, alterará las ya difíciles condiciones en las que se gestiona la vida en la región", expresó Meniailo, citado por Kommersant.
En vez de dividir el Distrito Federal de Siberia en tres macrorregiones, el representante presidencial propone crear una sola macrorregión que aglutine 12 sujetos federales. Según se apunta, la propuesta de Serguéi Meniailo ha sido recibida en el Ministerio de Desarrollo Económico y está siendo discutida en el seno del organismo.
