El Índice Nacional de Precios al Consumidor "registró en la primera quincena de enero de 2018 un incremento de 0,24%, así como una tasa de inflación anual de 5,51%", indicó el organismo federal.
Sin embargo, la inflación sigue lejos de las metas de inflación del Gobierno y el banco central de México, fijada en 3% anual (+/- 1%).
El incremento de los precios al consumidor en la primera quincena de enero de este año es menor al registrado en el mismo lapso de 2017, año en que los datos fueron de 1,51% quincenal y de 4,78% anual, cuando comenzó una tendencia alcista.
La inflación se disparó en 2017 debido, en primer lugar, al fin de los subsidios estatales a los energéticos.
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El Gobierno incrementó los precios de los combustibles para incrementar los ingresos fiscales y reducir el déficit del gasto público.
En segundo lugar, la inflación fue resultado de la depreciación del peso ante el dólar por la incertidumbre en la relación comercial con EEUU.
El índice de precios subyacente, que descarta el impacto de las estaciones del año, tuvo un crecimiento marginal en las primeras dos semanas de enero, de 0,17% quincenal, que la colocó nivel anual en 4,63%, cerca del techo de la meta oficial, de 4,0%.
En cambio, el índice de precios no subyacente, que contempla la volatilidad de las temporadas anuales, como las vacaciones, "aumentó 0,43%, alcanzando una variación anual de 8,10%", el doble de la meta máxima.
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El central Banco de México espera que la inflación alcance niveles cercanos a su objetivo presupuestal a finales de 2018 y que fluctúe alrededor de dicho nivel en 2019.
