"El dólar es una criptomoneda de su género, desconocemos cómo se controla su movimiento ni cuántos billetes realmente están en circulación a lo largo del mundo", dijo Ilarión en una entrevista con el canal Rossiya 24.
"Es muy importante estudiar el aspecto ético del fenómeno y la Iglesia también tendrá que participar en esta reflexión en un momento determinado", dijo.
La situación actual de las criptodivisas, para el alto cargo de la Iglesia Ortodoxa Rusa, es otra espiral en la creación de una burbuja, de una pirámide financiera que no tiene nada detrás.
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El metropolitano Ilarión comparó esa situación a la del dólar que ya no está garantizado por las reservas de oro de EEUU ni vinculado con recursos materiales específicos.
