El informe del Departamento de Asuntos Económicos y Sociales (DESA) de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) "demuestra que las actuales condiciones macroeconómicas ofrecen un margen más amplio a los responsables de formular políticas para que den respuesta a algunos de los muy enraizados obstáculos para avanzar hacia los Objetivos de Desarrollo Sostenible", sostuvo el secretario general del foro mundial, António Guterres, en el prefacio.
El reporte estima que el crecimiento es generalizado, pues dos tercios de los países experimentaron este año aumentos del Producto Interno Bruto (PIB) mayores que el año anterior.
"Se espera que el crecimiento mundial se mantenga firme en 3% en 2018 y 2019", dice el documento.
Las cifras positivas obedecen de manera predominante a la mejora de varias economías industriales, si bien las regiones de Asia meridional y oriental siguen siendo las más dinámicas del mundo.
De hecho, el Sudeste Asiático es responsable de casi la mitad del crecimiento de 2017, mientras China sola aporta un tercio del mismo.
Lea más: "La OMC no trae soluciones para los pueblos de América Latina"
A su vez, el fin de los procesos recesivos en países como Argentina, Brasil, Nigeria y Rusia contribuyó asimismo a elevar la tasa de crecimiento mundial entre 2016 y 2017.
Para la ONU, el desafío es canalizar este avance en una aceleración sostenida de las inversiones productivas con perspectiva de mediano plazo.
Con todo, persisten riesgos, como los cambios en las políticas comerciales, un veloz deterioro de las condiciones financieras internacionales y el aumento de las tensiones geopolíticas, advierte la ONU.
Retos
A largo plazo, los desafíos los que el mundo debe hacer frente se resumen en cuatro áreas, según el informe.
Ellas son una creciente diversificación de la economía, la reducción de la desigualdad, el respaldo a la inversión de largo plazo y el desmonte de deficiencias institucionales.
Por ejemplo, el crecimiento de los ingresos por persona será insignificante en varias regiones de África, Asia occidental y América Latina y el Caribe entre 2017 y 2019, donde viven unos 275 millones de personas en pobreza extrema.
El informe estima asimismo que muy pocos de los países menos adelantados podrán cumplir la meta de los Objetivos de Desarrollo Sostenible de llegar a un crecimiento del PIB de "al menos 7%" a corto plazo.
Más aquí: Moody's pronostica el crecimiento de la economía mundial en 2018
Los progresos de ese grupo de países se ven impedidos por deficiencias de sus instituciones, infraestructura básica inadecuada, elevados niveles de exposición a los desastres naturales, así como desafíos en materia de seguridad e inestabilidad política.
Mientras, la frecuencia de los desastres relacionados al clima sigue aumentando y demostrando la urgente necesidad de crear resiliencia contra el cambio climático y de priorizar la protección ambiental.
Siga aquí: Se vislumbra un momento dulce en la economía global
"Situación y perspectivas de la economía mundial" es el informe de referencia de la ONU en esta temática; lo publica anualmente la DESA en colaboración con la Conferencia de las Naciones Unidas sobre Comercio y Desarrollo, las cinco comisiones económicas regionales del foro mundial y la Organización Mundial del Turismo.