Ya en 2014, Mariani, un exdiputado de Les Républicains —Partido los Republicanos—, propuso controlar los pagos destinados a los franceses que se habían marchado a Siria. La propuesta en ese momento fue calificada por las autoridades como "absurda".
Juntamente con el parlamentario Alain Marsaud, un antiguo investigador especializado en casos de terrorismo, Mariani sugirió que el Parlamento llevase a cabo una investigación acerca de dichos pagos. El Ministerio del Interior de Francia, que entonces estaba encabezado por Bernard Cazeneuve, consideró la propuesta "absurda" y "ridícula".
De acuerdo con Mariani, es muy fácil recibir los beneficios ofrecidos por el Gobierno francés, pues el control sobre ellos es poco o casi inexistente.
"No hay necesidad de idear esquemas complicados, prácticamente no hay control: una persona puede salir del país tranquilamente durante un año y continuar recibiendo sus beneficios familiares", subrayó.
"Uno puede completar el formulario en línea para recibir beneficios de desempleo, mientras está en algún lugar del desierto en Siria, en algún país africano o asiático. Hay demasiadas personas desempleadas, y los funcionarios del Gobierno no se dan cuenta de todos ellos. Todo esto lleva al hecho de que prácticamente no hay control. Si te atrapan, significa que realmente no tienes suerte", concluyó.
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