Mencionó como ejemplo, en su artículo para el periódico Wall Street Journal, la decisión de la UE de recaudar 13.000 millones de euros de multa de la compañía Apple. Como resultado de una investigación, la Comisión Europea descubrió que Irlanda ofreció a la compañía incentivos fiscales injustificados.
"Las novedades en la manera que la Comisión Europea realiza sus investigaciones llevan a exigencias injustificadas del pago retrospectivo de multas, lo que contradice los principios jurídicos establecidos, pone en duda las reglas fiscales de algunos países y amenaza con debilitar el clima de negocios en Europa. Y para los contribuyentes, las actividades de la Comisión Europea amenazan con erosionar la base disponible de las empresas estadounidenses", comentó el político.
Agregó que los diputados del Congreso y los empresarios estadounidenses "condenaron ampliamente" la decisión de la UE. Como resultado, es necesaria para el país una reforma fiscal para las empresas —la que supone las prestaciones por una sola vez para las empresas que acuerdan devolver al territorio de EEUU lo ganado en el extranjero—, llevada a cabo por la administración de Barack Obama.
"El código fiscal actual contiene muchas lagunas que permiten a las compañías infravalorar deliberadamente los pagos de impuestos, trasladando el dinero de los países con una tasa impositiva elevada a los que tienen una tasa baja ", subrayó.
"En combinación con la tasa bastante baja de los impuestos a las empresas, nuestro complejo sistema fiscal para las empresas trasnacionales y la infraestructura obsoleta llevan a la erosión de la base imponible y convierte a EEUU en un país menos atractivo para los inversores", concluyó.
