"La UE y el Mercosur intercambiaron ofertas de acceso a sus respectivos mercados de bienes, servicios y compras gubernamentales", dice un comunicado conjunto de los dos bloques.
Se trata de la primera oferta desde 2004, "un paso necesario para impulsar el proceso de negociaciones. Las dos partes examinarán ahora las ofertas con más detalle", añade el texto.
En abril pasado, 20 de los 28 países de la UE habían solicitado a la Comisión Europea excluir de las negociaciones los llamados "productos sensibles", bienes agrícolas como la carne vacuna que constituyen los rubros fuertes del bloque sudamericano conformado por Argentina, Brasil, Paraguay y Uruguay.
Venezuela también integra el Mercosur, pero no participa de las negociaciones.
"Lo de hoy es un muy importante y necesario primer paso para llegar a un acuerdo que satisfaga a ambas partes", dijo en su cuenta de Twitter la canciller de Argentina, Susana Malcorra.
Los jefes negociadores de los dos bloques se reunirán en julio en Montevideo para discutir las ofertas respectivas.
Beneficios
Esta semana, la comisaria de Comercio de la UE, Cecilia Malström, destacó las ventajas que supondría para el bloque un acuerdo con el Mercosur, un mercado de 250 millones de consumidores que genera el quinto mayor producto interno bruto del mundo.
Según Malström, el Mercosur es por lejos el principal comprador de fertilizantes de la UE, el sexto mayor de sus productos farmacéuticos, el séptimo de los químicos y el octavo de la maquinaria.
Asimismo, en 2014 el bloque sudamericano se constituyó en el octavo mercado para los servicios de la UE, mientras Brasil solo era el tercer mayor destino de la inversión extranjera directa europea.
La UE estimó que un acuerdo de libre comercio le permitiría ahorrar más de 4.000 millones de euros en impuestos aduaneros, pues el "85 por ciento de las exportaciones de la UE al Mercosur están sujetas a aranceles (…) algunos particularmente altos, de entre 20 y 35 por ciento para algunas maquinarias y repuestos, de entre 23 y 35 por ciento para los automóviles y las bebidas alcohólicas", señala un documento difundido esta semana por la Comisión Europea.
En consecuencia, el acuerdo "podría eliminar o al menos reducir tales impuestos", indica la UE.
Las dos partes esperan que en las reuniones de julio se agenden las negociaciones para el segundo semestre de 2016.
