La demanda europea de gas ruso aumentará en el futuro, afirmó a Sputnik el embajador de Rusia ante la UE, Vladímir Chizhov.
"Considero que a largo plazo la demanda de gas natural en Europa solo se incrementará", indicó el diplomático.
"El año pasado hubo un aumento en comparación con 2014 pese a los rumores políticos y las campañas contra Rusia", señaló.
El proyecto Nord Stream-2, cuyo objetivo consiste en llevar el gas ruso a Europa evadiendo a Ucrania y Polonia suscitó preocupaciones en varios Estados de la UE y en la Comisión Europea.
En septiembre pasado la empresa gasística rusa Gazprom y las empresas europeas asociadas E.On, Shell, OMV, BASF y Engie firmaron un acuerdo.
Pese a la oposición de países como Polonia y las naciones bálticas, por temor a que aumente la dependencia energética europea de Rusia, Berlín reafirmó su interés en el proyecto, al señalar que este traería grandes beneficios a todos los miembros de la UE y proporcionaría la seguridad energética al bloque.
Por su parte, la Comisión Europea sigue estudiando hasta qué punto la legislación de la UE se aplica al gasoducto.
